El Lamborghini Centenario, o más bien LP770-4, es un coche estrechamente basado en el Aventador, pero estrena una gran lista de mejoras y ajustes para una pieza única, ya que tan solo se fabricarán 40 unidades.
El interior se inspira en el de un avión caza.
El Centenario LP770-4 recibe el aspecto más brutal del Lamborghini Aventador SV y lo mejora bastante. Tiene una cubierta completa de fibra de carbono que permite registrar un peso de tan solo 1.520 kilogramos y una relación peso potencia de 1,97 kg/CV. Estrena un splitter delantero, el cual, queda integrado en el parachoques frontal, difusor lateral específico para mejorar el flujo de aire y crear efecto suelo, así como unas entradas de aire enormes tras las puertas que refrigeran el potente motor V12.
Si nos vamos a la zaga, encontramos un perfil bastante agresivo, en el que destaca el difusor unido al cuadro óptico, de LED y con líneas muy afiladas, además del spoiler hidráulico y retráctil. Sobre este se haya la característica puerta para el vano motor. Incluso las llantas incluyen elementos de fibra de carbono para mejorar la eficiencia de peso.
Los detalles en amarillo y fibra de carbono del exterior también cubren todo el interior, inserciones de fibra de carbono, revestimientos de cuero y alcántara, un volante específico, un panel de instrumentos completamente digital y una consola central, en la que podremos controlar la gestión de la transmisión o arrancar el coche, además de modos de conducción. En el salpicadero encontramos una pantalla táctil de 10.1″ con soporte para Apple CarPlay y conexión a Internet. Lo más importante es que el software ha incorporado un soporte para telemetría que resulta útil en pista, mientras que dos cámaras instaladas pueden grabar toda la acción.
En el apartado mecánico encontramos un sistema direccionable para las ruedas traseras y una ligera mejora del motor V12, de aspiración natural, y 6.5 litros. En esta ocasión llega a los 770 CV de potencia, cifra que le permite pasar de cero a 100 km/h en tan solo 2,8 segundos, situando su velocidad máxima en los 350 km/h.
En relación a este incremento de potencia y rendimiento, el Centenario posee un sistema de frenado increíble, el cual puede parar el coche desde los 100 km/h hasta 0 en solo 30 metros, mientras que para la misma operación desde 300 km/h solo requiere de 290 metros. Según informes, las 40 unidades que se producirán ya están vendidas a un módico precio de 1,75 millones de euros la unidad.
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