Cuando me preguntan las diferencias entre las tres potentes marcas alemanas siempre digo lo mismo. Mercedes me parece la única que para impresionar, no es necesario pegar el morro al coche de delante para que se aparte. Esos seres son molestos al igual que el sonido de un mosquito buscando pista donde aterrizar mientras intentas dormir. Si te compras un Mercedes eres un señor y tienes la capacidad de elegir si encender la luz y cargarte el mosquito o simplemente ignorarlo y levantarte al día siguiente con un hinchazón sabiendo que has decidido salvar una vida.
El clase E coupé cautiva a cualquier mirada y si tienes una cámara te va a costar trabajo parar de hacerle fotos y de imaginar sitios nuevos a los que ir. No hay más que hablar, en diseño exterior está un paso por delante de sus «coleguis» alemanas .
El E coupé expresa algo que no hacen BMW ni Audi, algo que te obliga a girar el cuello cuando lo ves pasar y algo, que te dejará los zapatos llenos de babas sino cierras la boca.Y es que la linea AMG exterior no hace más que acentuar todas las sensaciones y dibujarte una sonrisa de pícaro en la cara nada mas verlo.
«¿Te recojo?»
Si nos vamos al interior Mercedes se puede decir que ha llegado a igualar o sobrepasar al que era el rival a batir, como Rafa Nadal en tierra batida, Audi, estaba en la cúspide de los interiores. Y es que los contrastes interiores y la calidad de los materiales son de ensueño.
En el interior tienes la posibilidad de tener el mismo CINESA incrustado en el salpicadero pagando 2.026,75 €, además llevábamos el Pack premium por 5.929 € que incluye, el detector ángulo muerto, navegador y asientos calefactados con memoria. Como la disposición de la regulación del asiento me pareció muy original he decidido poner una foto, a priori puede parecer que si pulsas cualquier botón puedes salir disparado al igual que en un caza, pero la realidad difiere mucho de la fantasía.
Para regular el asiento solo es necesario mover el botón de la misma forma que esa parte del asiento permite el movimiento, de lo contrario empezarás a notar que si sigues haciendo fuerza puedes quedar en ridículo si te está mirando más gente ya que requiere maña y da la impresión de que vas a partir el botón.
CONDUCCIÓN
A diferencia de su predecesor ahora el E coupé proviene del E berlina ,no como la generación anterior que provenía del C.
¿Y que supone esto?
Muy sencillo, más longitud más distancia entre ejes, más espacio, más anchura y desgraciadamente unos ‘kilitos’ de más que dejan la báscula en 1735 kg. Pero Mercedes se puso manos a la obra en temas de dieta, el motor es un 1950 cm^3 o 2.0 para los amigos del redondeo y está fabricado en aluminio (ha bajado a los 168,4 kg). Al igual la caja de cambios automática de nueve relaciones 9G-tronic también ha adelgazado frente a la 7G-tronic debido al uso de magnesio y aluminio. Es apasionante ver como Mercedes ha conseguido bajar el peso a pesar de haber aumentado el tamaño del cambio de 7 relaciones a 9. El magnesio es un elemento muy caro que pertenece a la competición y aeronáutica esa es una de las razones por la que equipar el cambio te obligará a desembolsar 15100€ pero seguro que podrás pedir un préstamo para poder pagarlo.
El 220 CDI da 194 cv y es difícil encontrarle un defecto. Es más potente rápido y eficiente que el 2100 cm^3 que equipaba el E coupé anterior y que solo daba 170 cv.
Son 194 cv ¿Correrá mucho?
Esta es la pregunta estrella y nunca mejor dicho
La respuesta es si… pero no…
El E coupé aunque solo tarda en hacer el 0-100 7.4 segundos no te da la impresión de que lo haga, en un principio, esto puede ser un problema, ya que tienes constantemente encendido el chivato del lector de señales de tráfico, que parpadea constantemente avisándote de que estás superando la velocidad legal.
En cuanto a los modos de conducción, hasta el modo ‘SPORT+’, que va más allá del modo ‘SPORT’ es cómodo, el cambio 9G-TRONIC es una gozada, es rápido y es tan suave que parece una CVT. Pero si quieres diversión te recomiendo que no pongas el modo ECO ya que tiene una obsesión por llevar el coche a 1300 rpm, hasta el nivel de meter 9º a poco mas de 110 km/h y de no reducir aun casi marcándote un ‘kick down’. Esa es la razón por la que no volví a ponerlo, el modo ECO es como una suegra molesta, no la quieres ver.
Para probar los diferentes modos de conducción hice un curso previo concentración y meditación y no fui capaz de ver diferencias notables en la suspensión, por lo que te recomiendo que pagues 2528,90 € por la suspensión neumática Air Body Control y que va a completar las sensaciones que puedes llegar a sacar de los modos ‘SPORT’ y ‘SPORT+’ .
Las sensaciones no son de un coche agresivo y deportivo pero tampoco es un inconveniente. No puedo poner una pega a este motor ni a la transmisión .Mercedes ha revestido las camisas de los cilindros de un tratamiento que ellos llaman NANOSLIDE para reducir la fricción entre el pistón y el cilindro. También ha mejorado el amortiguador de torsión de la caja de cambios que cambiando el centro de gravedad consigue minimizar las vibraciones.
¡Esto es impresionante !¿no?
Para los curiosos, el centro de gravedad es un punto en el cual el movimiento relativo es inexistente, por lo que mediante el amortiguador de torsión doble increíblemente se consigue contrarrestar cualquier tipo de vibración.
Mercedes ha apostado por la comodidad y suavidad desde el mínimo detalle ingenieril y lo ha conseguido. Pero…
»Si quieres diversión y te dan igual las emisiones te recomiendo ir a por un E300 o E400″
Me acuerdo el primer día que cogí el Mercedes, creía que no me iba a gustar, demasiado cómodo pensé.Pero… ¿Por qué no voy a querer un coche cómodo? .
Los días fueron pasando y me fue seduciendo. Mercedes ha puesto todo lo que tenía en la Clase E, tenía la oportunidad de hacer un gran coupé, lo tenía muy fácil y creo que no ha podido resolverlo mejor. Con el E coupé ha creado un rival incluso para el S coupé.
No tengo más que añadir, MAGNÍFICO.
Por último dar las gracias al Grupo Itra por el vehículo y no dudéis en visitar http://www.grupoitra.com/ para vehículos nuevos y ocasión.
