La marca de la serpiente de Viconti vuelve a resurgir como el Ave Fénix, de sus propias cenizas. Si aún no lo has percibido, hablamos de la marca de automóviles Alfa Romeo, que tras varios años de una lujosa travesía por el desierto comercializando los MITO, Guilietta y 4C desde la retirada del 159, ha vuelto con ímpetu impresionándonos a todos.
En abril tuvo lugar el lanzamiento del Alfa Romeo Giulia, que hizo que nos quedásemos atónitos con la versión QV, pero cuando la marca no nos había dado el tiempo suficiente para digerir el lanzamiento, en septiembre la marca milanesa se adentró en un segmento que hoy en día está en auge como es el de los SUV (Sport Utility Vehicle). Lo hizo con el Stelvio.
Estas líneas creemos que solo han servido para refrescar la memoria, sin aportar nada nuevo que el lector más ávido no supiese, son un guiño a lo que vamos a hablar a continuación. Nos referimos a la travesía por el desierto, mejor dicho, por los desérticos puntos de venta que tiene Alfa Romeo, en los que otras marcas, como Audi o BMW nos ofrecen un inmenso catálogo, trece modelos la marca de los cuatro aros y catorce la marca muniquesa, sin contar las versiones Gran Turismo.
Antes de que se retirase el Alfa Romeo 159, el actual presidente del grupo empresarial FCA y por aquel entonces Fiat Group, Sergio Marchionne, ordenó a su equipo de diseñadores empezar a crear el concepto 952, el actual Guilia y que desde entonces hasta que se lanzará el nuevo Giulia, Alfa Romeo dejo un segmento importante por abastecer a sus clientes, el de las berlinas deportivas. Se rumorea, que hubo un retraso en el lanzamiento de concepto 952 ya que el mismo Marchionne a mano del que fue discípulo de Pininfarina, Lorenzo Ramaciotti y con el jefe de diseño de la firma italiana Alessandro Maccolini revisaron y cambiaron varias veces de ideas para definir una auténtica máquina que cumpliera los tres pilares básicos de la marca milanesa, diseño (para que sea una compra emocional), calidad y deportividad y la verdad que el Alfa Romeo Giulia cumple con esos tres requisitos.
Nueva filosofía de futuro: un nuevo nivel de diseño
Si es cierto, que si por algo se ha caracterizado Alfa Romeo ha sido por sus diseños en los coches, se nota el buen gusto italiano en la moda y que lo han sabido extrapolar a la perfección a sus máquinas desde siempre. Las líneas interiores y exteriores de los 156 y 159 no se han caracterizado por la sobriedad y seriedad alemana habitual, sus diseños han girado sobre las formas circulares, las ruedas, las esferas y por consolas centrales espectaculares donde el geocentrismo italiano orientaba todo hacia el conductor y lo envolvía en un espectacular habitáculo que hacía que con sus asientos más básicos sintieras todo tipo de sensaciones qu transmitia la carretera, pero con el Giulia, todo ha cambiado mucho y aunque los diseños italianos sigan conservando esa parte emocional y de noble diseño transalpino, apenas encontramos formas redondeadas en su habitáculos y donde se le ha querido un papel más importante a la elegancia que hacia la deportividad que transmitía a los 159 y 156. La verdad que esta nueva fórmula nos ha dejado enamorados y al poco tiempo de presentar el Giulia, la marca decidió como ya he citado anteriormente el lanzamiento del SUV que ha roto todos los records en el infierno verde, el Stelvio QV y que donde las líneas que el Giulia inauguró han sido extrapoladas al Stelvio. Hay que decir que aunque a los Italianos les costó sus años encontrar la forma exacta del proyecto 952, pero han encontrado la mejor fórmula posible.
Giorgio: Un chasis espectacular
Siempre se ha dicho que uno de los objetivos que Sergio Marchionne quería conseguir era que la marca retomase el camino de la propulsión trasera, algo que implicaba desechar el chasis del 159 y desarrollar uno completamente nuevo pero con la eficacia de su antecesor. Si por algo se caracterizaba el chasis del 159 es por ser una autentica tabla en el paso por curva, un elemento auténticamente inamovible donde los detractores de la marca italiana se han quedado boquiabiertos con el comportamiento que tenía. Y es que el futuro de la marca y de FCA está en esta inversión, de más de un billón de euros, que se ha invertido en su desarrollo y es que obviamente, no solo el Giulia y el Stelvio lo va a montar, sino que la marca prevé en 5 años rearmar sus concesionarios con 4 modelos más. El grupo empresarial Fiat Chrysler tiene la intención de amortizar esta inversión en los Lancia Thema o Chrysler 300C, en los nuevos supercars de Dodge o hasta, inclusive, en los futuros Maserati, y es que el Ghibli, no monta el chasis Giorgio sino el del Quattroporte.
Bienvenida a Italia, propulsión trasera
La verdad que me llama mucho la atención de que la firma italiana haya decidido empezar a montar la propulsión trasera después del anuncio de BMW de retirarla del serie 1. Según marca la tradición, y aunque los futuros segmentos que vaya a sacar nada tengan que ver con el modelo de BMW, estas marcas son eternas enemigas que combaten por lograr apodos que sean sinónimos de agresividad, deportividad y diversión para todos y la verdad que aunque me sorprenda, me alegra esta decisión de los italianos por desarrollar un coche tan sumamente divertido como familiar.
QV, el italiano que saca los colores a los RS, M y AMG
Motor V6, con una cilindrada de 2900cc, con una admisión de aire compuesta por dos turbos, desarrollado en colaboración con Ferrari y que desarrolla 510cv y un torque de 600Nm entre las 2500 y 5000 vueltas por minuto, ¿no creéis que es la mejor forma de presentar artículos como estos? Y es que a mí se me ponen los pelos de punta aunque lo lea mil veces, pero es que si este motor lo metemos en una batidora con la tracción Q4, con la tecnología única Alfa™ActiveAero que es capaz de mejorar su aerodinámica (recordemos que tiene el mejor Cx de su categoría 0,25) y el chasis Giorgio, por no hablar de otros sistemas, un poco más comunes en su categoría, crean una mala bestia capaz de sacar los colores a los alemanes más potentes. Aunque no pretenda hacer una comparativa del Giulia, si me gustaría mencionar la potencia y la cilindrada de los motores, respectivamente, del Audi RS4 2017 (próximo lanzamiento) que se cree que tendrá el motor del Porsche Panamera 4S y que será un bloque 2.9 V6 BiTurbo que desarrollará 500cv, su competidor más directo el BMW M3 monta un 6 cilindros en línea, con 3000cc, turbo alimentado que desarrolla 431cv y por último el Mercedes-Benz C63 AMG, monta un 8 cilindros en V turboalimentado, con 3982cc y que desarrolla 510cv. En conclusión, no sé qué saldrá de un duelo entre estas bestias, pero que yo quiero verlo, juzguen ustedes mismos.
¿Qué tienen preparado para sorprendernos? El posible futuro de Alfa Romeo
Como ya he mencionado antes en la sección “Giorgio: Un chasis espectacular”, donde cito que la inversión del chasis ha sido de un billón de euros y que la marca prevé 4 lanzamientos más en los próximos 5 años, y aunque no sea un amante de la prensa amarillista, ¿porque no especular un poco con lo que pueda o no sacar Alfa Romeo en estos próximos años? Porque no imaginar que el primer lanzamiento será un nuevo coche compacto, el Giulietta II, con la nueva imagen de la marca, los pilotos traseros del Stelvio y unas ópticas delanteras como la del Giulia, aunque si compite con el serie 1 de BMW creo que la mejor opción no será montar la propulsión trasera; otro de los segmentos que le falta a la marca de la serpiente de Viconti es una berlina grande, algo para competir contra el BMW serie 5, Audi A6 o Mercedes clase E y es que la máquina que por historia podríamos llamar Alfetta o heredero del 164 y 166, creo que seria uno de los serios candidatos en estar en estos próximos años en los concesionarios y acompañado de su homónimo en forma de SUV para competir con los Q5 o GLE y otros de los segmentos donde se escuchan bastantes tiros, es el Giulia Coupé una berlina deportiva diseñada para competir con los series 4, A5 y C-Coupé. Aunque dispuestos a soñar con estas formas con las que nos han deleitado los italianos, porque no, dar la bienvenida a un nuevo 8C Competizione para rivalizar con el R8 o el GT-AMG. Lo que si podemos dejar de pensar que es un sueño y que se ha convertido en realidad, es que Alfa Romeo, la marca que Enzo Ferrari consideraba “la madre”, ha vuelto a resurgir para combatir con marcas premium de gran calado.